martes, 30 de octubre de 2007

TRABAJO DE FILOSOFÍA Y LITERATURA

SOBRE EL ACTO DE LEER

“Leer es ir al encuentro de algo que está a punto de ser

y aún nadie sabe que será…”

Italo Calvino

Si una noche de invierno un pasajero, 1979

“Porque el deseo de leer, como

todos los demás deseos que

distraen nuestras almas infelices,

puede ser analizado”

Virginia Wolf

Sir Thomas Browne, 1923

Analizando a cabalidad la argumentación de este ensayo, en primera instancia, viene a mí la siguiente conjetura ¿Por qué será que algunas personas relacionan todo el acto de la lectura a actividades netamente académicas o adquirir información y no a desarrollar más el potencial de verdadero aprendizaje?, o de forma más coloquial, a divertirse con la lectura, pasar un rato agradable con esta, lejos del mundanal ruido y obtener ese placer curativo, es decir, nos devuelve a la condición de ser otro, de adquirir cierto grado de desarrollo interior y un aprendizaje del mundo y sus ideas.

De una manera u otra, para responder lo anterior cabría decir que muchas veces olvidamos los beneficios de leer, y que su práctica ejerce en la persona un amplio apoyo tanto en el campo intelectual como en el social y personal.

Conjuntamente con lo anterior, la finalidad de este corto escrito es denotar ¿que es leer? enfatizando principalmente en dos autores: Piedad Bonnet y su artículo titulado De la Literatura por Deber y otras Aberraciones en La Pasión de Leer y Elementos Para una Teoría de la Lectura (lectura e interpretación) de Juan Fernando Pérez Salazar.

Para empezar con ambos autores, se traza un pequeño paralelo y se denota lo siguiente: Bonnet destaca el acto de leer como un gozo, en sus propias palabras dice “La lectura solo puede concebirse como un placer” (Bonnet 2003:20).

Se resalta sus propios pasos para hacer de la lectura un goce, destaca que en primera instancia hay que saber leer bien, sin sobresaltos o pausas que no están determinadas en las lecturas, en segundo término el recogimiento del silencio o la necesidad de leer sin la intervención de ruidos externos, y la siempre ineludible lectura de poesía, que se ha vuelto últimamente declinable en los argores de colegios y universidades.

Para entender la comprensión de la poesía, la autora indica factores a seguir para su mayor agudeza: “La modesta, la maravillosa lectura compartida. Una primera vez en boca del maestro (…) Una segunda vez en boca de un estudiante de aquellos que sí aprendieron a leer. Una tercera, guiada, verso por verso, (…) Y una final, ya lleno el poema de sentido, en la cual encontrará expresión la emoción íntegra de haberlo, así sea fugazmente, poseído” (Bonnet 2003:24 – 25).

Otro paso es el contacto con los libros y esto se representa principalmente con ir a las bibliotecas, ya es el génesis para realzar el buen lector que hay en todos nosotros. La cual en mi opinión es la mas importante, ya que no es lo mismo que se obligue a leer un libro cualquiera sin medir el interés que se tenga por este, a hojear la gran cantidad que hay y escoger cual llama la atención, con cual se siente identificado el lector.

De otra parte, Salazar sistematiza más la cuestión enfocando una división de esta. Dice, definiendo la lectura “Asumo la lectura como un acto de interpretación del texto” (Salazar 1997:8). Más adelante agrega que “Conviene considerar que leer es un acto de discusión amistoso o no, que a menudo se prolonga mas allá de la lectura misma” (Salazar 1997: 9).

Es decir, se complementan sus dos significados dando a entender la importancia de conocer a fondo lo que se lee, a establecer que es lo que el texto quiere plantear, e investigar en una posterior re-lectura en base con el mismo autor u otro una serie de argumentaciones o discusiones que se recopilan o dejen preguntas en el mismo lector.

Además alude a tres tipos de lectura, la intratextual, la intertextual y la extratextual, señalándolas, “ La lectura intratextual: aquella que aspira a investigar un texto para intentar establecer sólo desde el texto mismo lo que éste dice; lectura intertextual,segundo tiempo de lectura en el cual se pretende cotejar y someter a discusión párrafos, conceptos, enunciados, de dos o más textos, y finalmente lectura extratextual que pretende ubicar un enunciado o un conjunto de ellos, como campo referencial explícito donde debe inscribirse el texto base y que no es objeto de discusión. El conjunto de los tres tiempos se denomina lectura analítica”(Salazar 1997:7). Estos son los pasos a seguir de todo buen lector que promueve el autor para adquirir a completud todo el saber necesario que una lectura expresa.

Alrededor de ambos autores se construyen los primeros beneficios de la lectura, entiendo por el placer que Bonnet expresa como ese desarrollo, como ninguna otra actividad lo hace, de la imaginación y la creatividad, es la transformación que la lectura hace en nosotros, forma más nuestro interior añadiendo nuevas posibilidades de conocer un mundo ajeno a nuestra sensibilidad común.

Con respecto a Salazar, determino en él un carácter de beneficio en la importancia que da a interrogar al propio lector respecto de sus propias posiciones, tratando de demostrar que se abstenga de divergencias inmediatistas respecto a x o y lectura y proceda con naturalidad a interpretar, analizar el texto sin presiones ajenas a la propia lectura.

Respecto a estos dos autores considero que sus definiciones de la lectura son concluyentes y básicas para entender o afrontar en sí el concepto de la lectura, y empezar a tomar en serio la necesidad de leer, pero agregaría la siguiente pregunta ¿para que se lee? Quiere leer, quién duda de su presente, de lo que ve y escucha. Desea entrar en la conciencia del otro y a la vez analizar la propia.

A través de la literatura, podemos aprender y aprehender, a conocer mundos distintos al nuestro, a pensar diferente, dinamizar el pensamiento.

Desde la lectura se requiere salir de si, pensamos el mundo desde el yo, escuchamos e interiorizamos distintos argumentos, dejamos entrever la posibilidad de debate con el autor.

Minimizamos o expandimos la credibilidad de un raciocinio, de esa sospecha que se creía tener y que ya no lo es. Se confirma, leer es investigar, divertirse, atender a cuestiones cognitivas y constructivas para el desarrollo interior y exterior.

Leer es hoy un acto complejo y que no se limita a in libro en particular, hay que capacitar al lector para que sepa interpretar y ser crítico con todos los mensajes, sean de cualquier tipo.

Indudablemente existe la necesidad de leer más, de aprovechar todos los recursos posibles para apreciar con suma constancia toda la información que un autor quiere exponer. Hoy más que nunca se necesitan lectores críticos, capaces de discriminar y seleccionar toda la variedad de ideas que el mundo de los medios arroja.

Finalmente, saber leer es un privilegio, tener el hábito de la lectura lo es aún más, así que aquel que desee superarse tendrá a la lectura como su mejor aliado. Es esta, en sí misma, un acto o ejercicio de alto nivel reflexivo que se necesita complementar diariamente.

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